La primera vez que escuché una canción sobre huesos de jalea con un ritmo tan juguetón entendí que a Nick Diamonds no le importa lo que piensas, no se sienta en el centro de las oleadas de la opinión popular y es capaz de lanzarse con comodidad hacia una colección ecléctica de rarezas y finales pop-experimental, revelando excesos entre géneros e instrumentos, algo que luce aún mejor cuando los amalgamas con términos ridículos y letras bizarras.
Tal vez es algo que no sorprende, pero después de dos discos de Islands rebotando aún en mi mente, encontrarme con Vapours es un deleite que empieza a convertirse en obsesión con cimientos pop. Tal vez son los salvajes y fisicamente abrumadores solos de guitarra. Tal vez fue el costo prohibitivo de contratar a toda una orquesta. O tal vez Diamonds y compañía se enfermaron de tanto escribir cortes de más de siete minutos sin sonar demasiado ambiciosos. Como sea lo es, Vapours es intangible, conciso, sin canciones más allá de cinco minutos, con puntos altos accesibles, llenos de electronica basada en indie pop, con máquinas de ritmo y bajos que fluyen sobre unas brillantes vocales, un pulso hipnótico de placeres instantáneos.
Nada ejemplifica mejor ese sentimiento que el corte que da título al disco, una pieza que no sólo es la canción más accesible en la historia de Islands, también tiene la grandiosa frase: “it’s the bassline in your mind! It’s a sexy way to cry!”, y eso es un poco antes de que aparezca la irreprimible y vibrante sección del bajo.
Pero claro, no podría ser Islands sin un poco de rareza, y Vapours derrocha momentos extraños. Sólo un ejemplo, No You Don’t parece armado con sampleos de Nintendo, con bleeps y boops sin mesura. Sin embargo la mejor parte de Vapours son las típicas capas de sonidos de Islands, sus ganchos instantáneos que revelan demasiado cada vez que lo escuchas. Todo suena meramente adecuado, pero cada vuelta muestra una deconstruction gradual, pequeñas complejidades que ya existían en Arm’s Way y Return To The Sea, pero en esta ocasión se tratan de estructuras disfrazadas de simpleza pero que crecen hacia lo complejo conforme van echando raíces en los oídos (necesario escuchar Vapours con audífonos).
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comments:
Publicar un comentario