Se apagan las luces, te medio contoneas en la oscuridad con la cara iluminada por una cascada de luces espectrales, suena la canción que has esperado escuchar en vivo desde hace más de 10 años, estás en éxtasis tarareando en un susurro para no tapar la voz del vocalista y a tu derecha se escucha otra voz: ¿me das chance?.
Y así empieza el ir y venir de los gitanos de conciertos, los grupos y parejitas errantes que parecen esperar la oscuridad para serpentear entre cuerpos, para rozar burbujas colectivas y, sobre todo, para impedir que te sumerjas en la euforia con sus “me das chance”, “permiso” o “ay perdón por empujarte y no dejarte ver nada cuando se me ocurre detener mi errar y mi cabezota y las cabezotas de mis otros cinco cuates frente a ti”.
Puedo entender esa necesidad de caminar de un lado a otro para matar el tiempo en lo que un concierto comienza, si es necesario mover los pies para contener y canalizar la euforia, para hacer fluir las cervezas y la chatarra, para ver caras y esconderse de otras, y buscar el lugar adecuado para el momento en que de forma masiva una canción tendrá sentido, pero la verdad no entiendo el objetivo de rondar por todos los espacios cuando las luces se han apagado y hay un grupo revolcándose en energía en el escenario.
Mucho menos puedo entender la necedad de algunas chicas de desafiar las leyes de la física, en serio, aunque tus genes dicten que eres un tapón y te hagan tener actitud perruna y empujar/rebotar/asediar para reclamar un espacio, dos cuerpos no pueden ocupar un mismo espacio (bueno, si pueden… pero hablamos de un concierto).
En otras anotaciones sobre ese mismo (enorme, grandioso, delirante) concierto:
- ¿Alguien podría quemar ese sombrero de Dr. Seuss o alisar un poquito ese afro?
- ¡Oh, rólala o apágala!, porque la neta ya me está dando hambre de tanto olerla
- Ouch, si aullamos bastante gacho, pero somos puro sentimiento
- Mmmhhh, a Ralf Hütter ya le aprieta su trajecito de Tron
- ¿Es caguama delux o por qué cuesta tanto?
**Debido al reclamo de espacio de una pequeña amiga, debo aclarar que si fue un fastidio encontrarme con tres pequeñitas que se propusieron en diferentes momentos quitarme mi lugar sobre un escalón, el intento de desplazamiento a base de cadera no sirvió de nada (los que me conocen saben porqué), pero aún asi... carajo, las leyes de la física deben respetarse!!
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