Lonely Dancer

The Black Keys, uno de esos grupos de los que adoro escribir, no sólo porque me encanta la crudeza de su música, sino porque a pesar de haber involucrado en la producción a agentes externos para engrosarla (Danger Mouse), siempre se remiten a lo simple, el más claro ejemplo es el reciente vídeo de Lonely Boy, que efectivamente muestra una pieza de entretenimiento visual y contagio de ritmo con su bailarín solitario.

Tan simple como una persona bailando enloquecida (pero con increíble alegría), abordando todo tipo de pasos, sincronizándose con cada palabra. Es cierto, ya hemos visto a usuarios de YouTube posteando rutinas de baile sin ninguna razón, así que ¿porqué no tomar a una persona común y convertirla en la estrella de un vídeo promocional de una banda que ya abandonó el anonimato? Para mi tiene sentido y me roba una enorme sonrisa.