The Eraser

The more you try to erase me, the more, the more, the more that I appear
The Eraser – Thom Yorke

Desde que la palabras “editar” y “borrar” acompañan nuestros comentarios hemos empezado a moldear la realidad a nuestro gusto, al menos la realidad de nuestra versión virtual que entra y sale dejando unos bits como rastro de nuestra existencia. Las usamos concientemente modificando palabras, borrando comentarios como si se trataran de escenas que no nos satisfacen en el corte final y que rompen con la continuidad narrativa de nuestros pensamientos.

Lo que inicia con un comentario, que con el sólo hecho de ser publicado ya es una exposición pública ineludible, se convierte en un ping-pong de palabras y frases tomadas, desplazadas al mundo paralelo del DELETE, donde la cuestión inicial se enfrenta al corte final cargado de subjetividad, podemos tomar y quitar tanto como queramos hasta encontrar la frase que satisfaga nuestra necesidad de tener la razón siempre. Lo no dicho no importa y lo borrado sólo es un paso hacia ese final satisfactorio en detalles.

DELETE, DELETE, DELETE... Pareciera que hemos aprendido mucho de las películas y las series de televisión, tal vez por eso borramos-editamos lo que no entra en nuestra puesta en escena, dejamos algunos fragmentos para el bonus, los “Huevos de Pascua” y "Secret Scenes" del DVD de nuestro proyecto de cine de autor, donde desarrollamos estilos reconocibles y tatuamos nuestra filosofía de vida, pensamientos, política y los destilamos en un sonoro DELETE.

Debatimos con el “Eliminar” en la mano, esperando dispararlo contra cualquier elemento, manipulamos la información y creamos nuestro falso final alternativo, dirigimos las respuestas hacia el lugar donde el lenguaje es el que habla, no el autor. No importa si entre nuestra visión y el final desaparecen un millón de ideas, porque la respuesta honesta carece de interés, sólo tienen significado el conjunto de palabras que nos den la razón...

*** Razonamiento después de un debate online en contra que fue recortado comentario por comentario hasta que se convirtió en una involuntaria postura a favor, definitivamente me hicieron una gran edición.