Ciclo

Sabio más allá de sus años,
tiene parpadeos mentales
mientras está realmente centrado
en las minucias de otra cosa.
Más honesto en sus letras
que en sus palabras
está consciente,
incluso antes de que el evento ocurra
observando sobre mi hombro,
vigilando a ese
que supuestamente
siempre está observando todo
y dice estar en todos lados.

Él, omnipresente ausente,
dueño de las mejores islas
que no están en el mar
y de horizontes limitados,
revisa la rutina si todavía duele,
bebe manantiales de preocupación
en la atmósfera superior de una cabeza suelta.

Adolorida piel
que no puede aceptar otro golpe,
revisa el camino,
encuentra las migas
donde antes había pan
y la infinitud de las líneas por recorrer,
se hace más ligera que su mente.

Demasiado brillante durante el día,
entra en la oscuridad para hablar
y cumplir el ciclo
de morir en su cumpleaños.
Nace y muere al mismo tiempo,
aparentemente no realizó el recorrido.